Divorcio Express
¡Bienvenidos!, en este post voy a intentar resumir muy sencilla y coloquialmente, en qué consiste el divorcio express.
Obviamente, divorciarse no suele ser plato de buen gusto, pero tampoco tiene por qué ser una situación traumática para las partes que han decidido llevar caminos separados.
Normalmente, cuando pensamos en un divorcio, se nos viene la imagen del Juez con su toga y su mazo, y a los abogados tirándose los platos a la cabeza en defensa de cada una de las partes. Lo cierto y verdad es que, en cierta forma, así es, pues el juicio, suele ser bastante intenso y violento para la pareja. En estos casos, la guerra está servida…
Lope de Vega decía, “el amor tiene fácil la entrada y difícil la salida”, y no andaba desencaminado, pero, facilitarnos la salida, es algo que depende única y exclusivamente de nosotros.
Si un día decidimos ser felices, ¿por qué vamos a ponernos trabas en el camino?
Es en estos casos, donde el divorcio express se establece como un mecanismo que nos permite poner fin a nuestro matrimonio, sin la necesidad de pasar por un procedimiento judicial que va a ser largo, costoso y que finalmente, va a resolver un tercero, en este caso, el Juez.
Si un día decidimos como casarnos, decidamos también como divorciarnos.
Para realizar un divorcio express, es necesario cumplir unos requisitos que básicamente se encuadran en dos: divorciarse de mutuo acuerdo y que no existan hijos menores de edad. Este procedimiento se tramita ante notario, con la aportación de un convenio regulador, previamente consensuado por las partes.
Por tanto, las ventajas fundamentales de un divorcio exprés son, no sólo el ahorro de tiempo, pues el trámite es mucho más sencillo, sino que también a nivel económico, estamos ante un trámite menos costoso.
CONSEJO FINAL
Ya saben, no se peleen, y sobre todo, no se divorcien, pero en caso de hacerlo, pónganse de acuerdo y háganlo a través del divorcio express.
